La iniciativa Parques Nacionales Cómo Vamos (PNCV), de la cual forma parte la Universidad de los Andes, presentó el primer informe del nuevo Observatorio de Indicadores del Sistema de Parques Nacionales Naturales (PNN). Éste, es un llamado a comprender el papel los PNN y la biodiversidad, en las dinámicas territoriales de los 254 municipios del país y en las regiones donde se encuentran.
En el país existen 59 Parques Nacionales Naturales con más de 17 millones de hectáreas con gran diversidad ecológica que contribuyen al bienestar de los colombianos. Este informe insta a entender que cada uno de los PNN del país tienen características muy diferentes que los hacen únicos y que, al mismo tiempo, los llevan a ser vulnerables frente a los efectos del cambio climático.
En el informe
Los expertos identificaron que, si bien los Parques en conjunto mantienen un buen estado de su biodiversidad, hay indicios de los efectos negativos que pueden estar causando en ellos la transformación de los territorios donde se ubican, así como el cambio climático, que se refleja en pérdida de glaciares, páramos, corales, sabanas naturales y bosques, lo que aumenta la necesidad de que el país se prepare para gestionar daños irreversibles.
Para Sandra Vilardy, Directora de PNCV y profesora de la Facultad de Administración, es muy importante hacer un llamado a los colombianos para resignificar el papel de la biodiversidad, “somos el segundo país con mayor biodiversidad por superficie en el planeta. Tenemos algún tipo de acercamiento a la biodiversidad con temas estéticos o de uso, pero nos falta identificar esa gran variedad de elementos que hacen valiosa la biodiversidad.
La clave es entender que la biodiversidad no solo es bella, su funcionamiento contribuye de manera significativa al bienestar de todos e incluso al desarrollo económico. Somos eco-dependientes”.
En 15 de los 59 PNN
Se registraron amenazas relacionadas a la deforestación, violencia y los cultivos de uso ilícito. Los parques más afectados son Paramillo y Sierra Nevada de Santa Marta, ubicados en el Caribe, y Tinigua y Macarena, en la Orinoquía; y Catatumbo Bari, en Andes Nororiental.
El Observatorio proporciona datos de 35 indicadores internos y externos que permiten identificar el estado de las Áreas Protegidas y sus principales afectaciones, y su análisis posibilita identificar patrones para plantear mecanismos diferenciados para su gestión.
“Necesitamos ser conscientes de los retos que nos va a generar la crisis climática a nivel territorial, el enfoque debe ser local y regional para analizar cada escenario y diseñar mecanismos mucho más regenerativos. Esa naturaleza que hemos perdido alrededor de los parques se debe reconectar, restaurar y regenerar. Esto tiene que ir de la mano con los gremios, las organizaciones y la sociedad civil, para reconocernos eco-dependientes porque necesitamos restaurar el capital natural”, comenta Vilardy.
Participantes
Durante el lanzamiento en vivo participaron Brigitte Baptiste, rectora de la Universidad EAN, Felipe Bayón, presidente de Ecopetrol, y Cristián Samper, Director Ejecutivo de Wildlife Conservation Society.
Felipe Bayón resaltó la importancia de tener datos actualizados que permitan generar una visión sobre la necesidad de generar cambios particulares, ya que gran parte de las emisiones a hoy de CO2, provienen de la deforestación. “Colombia tiene que convertirse, por su ubicación en el mundo, en un referente potencial de cambio”, asegura.
A su turno, Brigitte Baptiste, aseguró que, si bien es importante tener el panorama con los indicadores que se presentan en el informe, también es necesario establecer un análisis con perspectiva histórica para entender cómo ha cambiado el manejo y administración de los Parque Nacionales a lo largo de la historia en términos de los indicadores. “El llamado permanente es que los Parques Nacionales sean objeto de política de Estado y reconocer la diversidad cultural como un agente de conservación”.
Por su parte
Cristián Samper, destacó la importancia de los indicadores en los municipios alrededor de los Parques porque el futuro de estos, depende de lo que está en su entorno. Menciona que el país tiene un gran potencial de transformación para la lucha contra el cambio climático. “Las Universidades pueden contribuir mucho para que los Parques sean esos laboratorios de investigación a largo plazo para generar conocimiento y ayudar a formar la capacidad de la gente”.
Esta iniciativa, que forma parte de la Red Colombiana de Ciudades Cómo Vamos, y está integrada por la Fundación Santo Domingo, la Fundación Corona, la Fundación Natura, Alisos, WWF Colombia, WCS, Dejusticia, la Pontificia Universidad Javeriana y la Universidad de los Andes.
El informe completo de Parque Nacionales Cómo Vamos, lo pueden consultar aquí.